Anne Jakrajutatip, propietaria de la franquicia Miss Universo, reveló este domingo que la familia de la actual Miss Universo, la nicaragüense Sheynnis Palacios, ha dejado Nicaragua y que la reina de belleza ha sido exiliada de su país de manera «indefinida». Jakrajutatip compartió esta información en una publicación en Instagram durante el Día de la Madre, en la que también elogió a Karen Celebertti, exdirectora de la organización Miss Universo en Nicaragua, quien fue expulsada y acusada de conspiración y traición a la patria por el gobierno de Daniel Ortega.

En su mensaje, la dueña del Miss Universo resaltó las cualidades humanas de Palacios, alabando su fortaleza y dedicación, especialmente hacia su madre y su familia, quienes ahora se encuentran fuera del país. “…tu familia, incluida nuestra Reina, ha sido exiliada indefinidamente debido al poder de la marca Miss Universo”, escribió Jakrajutatip.

Según el diario La Prensa de Nicaragua, se ha discutido en redes sociales que la abuela y el hermano de Palacios, que actualmente reside en Nueva York para cumplir con sus obligaciones como Miss Universo, habían dejado Nicaragua para reunirse con ella bajo un «parole humanitario», un mecanismo migratorio facilitado por Estados Unidos.

Sheynnis Palacios, quien se convirtió en la primera nicaragüense y centroamericana en ganar Miss Universo en la edición celebrada el 18 de noviembre de 2023 en El Salvador, no ha regresado a Nicaragua. En los últimos meses, ha visitado San José en Costa Rica y Miami en Estados Unidos, ciudades que albergan importantes comunidades de la diáspora nicaragüense.

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En respuesta a las acusaciones contra la representación de Miss Universo en Nicaragua, el gobierno de Ortega lanzó su propio certamen de belleza el pasado 26 de abril.

El cardenal hondureño Óscar Andrés Rodríguez expresó este domingo su preocupación por el calentamiento global durante su homilía en la Basílica Menor de Suyapa, en el este de Tegucigalpa. Rodríguez destacó que, aunque la población se queja del aumento de las temperaturas, hay una falta de compromiso efectivo para abordar esta crisis climática.

“Todos lamentamos el calor intenso, una clara señal del calentamiento global que nos afecta, pero faltan acciones concretas para un cambio real”, señaló el prelado. Según él, la sociedad debe enfrentar no solo una crisis ecológica, sino también una crisis antropológica profunda y una pérdida del sentido de la vida.

Además, criticó la actitud de indiferencia ante la destrucción ambiental, especialmente la quema de bosques, y la persistente contaminación en la capital hondureña. “Tegucigalpa está cubierta de humo, y eso debería hacernos reflexionar sobre nuestra responsabilidad en el deterioro ambiental”, añadió Rodríguez.

El cardenal también cuestionó el tipo de legado que se dejará a las futuras generaciones si no se toman medidas. Subrayó la urgencia de un cambio, indicando que Honduras no puede permitirse seguir deteriorándose.

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Este llamado a la acción se produce en un contexto en el que Honduras mantiene una alerta roja indefinida en dos departamentos y una alerta amarilla en otros cuatro debido a la alta contaminación del aire. La Secretaría de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales ha advertido sobre los niveles críticos de contaminación, exacerbados por las altas temperaturas, incendios forestales y la falta de precipitaciones.

El Instituto Nacional de Salud (INS) de El Salvador ha lanzado este mes el primer programa de inteligencia epidemiológica en Centroamérica como parte del proyecto ECHO que implementa la institución.

El programa, denominado ECHO INS El Salvador, reunirá a epidemiólogos del país para abordar casos importantes y aplicar los conocimientos adquiridos en el primer nivel de atención del sistema de salud, según explicó el doctor Luis Enrique Fuentes, coordinador del proyecto. Este programa, que tiene como objetivo mejorar la calidad de la atención médica, se implementa por primera vez en Centroamérica, convirtiendo a El Salvador en un centro de operación líder en la región.

La inteligencia epidemiológica, como define la Organización Panamericana de la Salud (OPS), es un proceso que implica la recolección, análisis e interpretación de información de diversas fuentes para detectar, verificar e investigar posibles amenazas para la salud pública. El INS capacitará a los profesionales para implementar este proyecto, como parte de la estrategia de institucionalización del programa de epidemiología de campo.

Además del programa de inteligencia epidemiológica, el superhub ECHO INS El Salvador tiene proyectado para este año la creación de dos hubs sobre infectología pediátrica y servicios de apoyo diagnóstico del Ministerio de Salud (Minsal), así como la implementación de programas TeleECHO en especialidades médicas de alto nivel, como radiología clínica y anestesiología.

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El proyecto ECHO ha tenido un impacto significativo desde su inicio en 2021, con casi 50,000 participaciones registradas hasta abril de 2024 en sus 15 programas. Estos programas abarcan diversas áreas de la salud y han experimentado un notable crecimiento en la participación, lo que demuestra el interés y la efectividad del proyecto en la creación de una comunidad de práctica y en la difusión del conocimiento médico actualizado y completo.